domingo, septiembre 21, 2008

¿el fin del Liberalismo?


Difícil, muy difícil será que las cosas vuelvan a ser como antes. La credibilidad del Liberalismo ha sufrido un duro golpe y sobre todo en el país que más fuerte apostó por él. Un golpe que ha hecho que los organismos reguladores interviniesen para "apuntalar" las economías, que se han demostrado extremadamente frágiles. Los resultados... ahí están. Podría desprenderse de ello que las decisiones tomadas han sido las correctas, pero... permitidme que yo a título meramente personal asuma las palabras de Federico: cuando la ineficacia no tiene castigo y la eficiencia y la honradez no tienen recompensa, todo se desmorona. Nadie obligó a los bancos a conceder créditos de dudoso cobro; nadie persuadió a quienes se endeudaron enfermizamente de la práctica imposibilidad de hacer frente a los compromisos adquiridos.
Alberto Recarte hace un análisis valiente y acertado de todo lo que ha sucedido. Ante la imposibilidad de vender su "deuda envenenada", los kamikazes de la banca han sido rescatados por quienes no tendrían que haberlo hecho. La única misión de los organismos reguladores ha de ser el velar por la libertad en las "reglas de juego" y considero que su intervención, si bien ha salvado momentáneamente el batacazo, traerá muchos problemas en el futuro. Para que nos entendamos... será pan para hoy, pero hambre para mañana.

Lo peor de todo, es que todo ésto ha "cargado de argumentos" (aunque como siempre serán usados de modo manipulador y falsario) a los defensores del intervencionismo: a los progres. Les ha dado un "balón de oxígeno" a quienes defienden modos de hacer política alejados de la realidad y del sentido común. Pero les recomiendo que no se animen demasiado, ésto no ha hecho más que empezar y como en el dicho popular: arrieros somos y en el camino nos encontraremos. Se mire como se mire, el el Intervencionismo es nefasto; porque no respeta las reglas del libre mercado y sobre todo, porque con el dinero de todos, de los contribuyentes que tan dificultosamente llegamos a fin de mes, se premian conductas irresponsables.

En resumen, espero que se haga caso a personas como José Mª Aznar y se vea que la solución pasa por la honestidad y, por ende, por la "refundación" del Liberalismo. Aunque resulte a priori paradójico, las soluciones están en la Globalización y en el Liberalismo, y NUNCA en el intervencionismo y en la vuelta a políticas que ya han demostrado su incapacidad.