Hace ocho años...

Ya hace ocho años... y aún parece que fuese ayer. Las lágrimas se nos escaparon a todos cuando dieron certeza del fatal desenlace: los criminales de ETA cumplieron su palabra, y te asesinaron a sangre fría, con una frialdad y una mezquindad que dificilmente pueden superarse. Pero tu muerte, Miguel Angel... fué el más grave error cometido por esos mafiosos que se creen Dios; por esos que se creen con la capacidad de escoger quien merece morir y quien seguir viviendo. Seguro que desde allí arriba pudiste ver que aquí abajo algo cambió...



por primera vez en la Historia... la gente se atrevió a salir a la calle... a arrinconar a los violentos. Todo ello, aún a costa de los sueños que nunca realizarías... de la entrega de tu vida... ha quedado escrito con letras de oro en las páginas de la valentía, y da una muestra de cuanto poder tenemos quienes no necesitamos de las armas para defender nuestras ideas. Como las defendiste tú, Miguel Angel. Yo también pertenezco al Partido Popular... estoy en la zona en donde la vergüenza de Perpiñán me protege. Pero tú sabías perfectamente que estando en donde estabas y del lado de quien estabas, te arriesgabas (como por desgracia sucedió) a perder la vida.
Pero... ¡ay!. Ahora quien nos gobierna se propone seguirle el juego a quienes te arrebataron la vida a tí y a todos los otros. Desde la emoción que me produce el recordarte, indico que desde el primer día ha estado en el margen izquierdo el link a la Fundación Miguel Angel Blanco. Recomiendo a todos quienes visiten este blog, que se acerquen por allí; la actividad de esas personas maravillosas no ha decaído con el paso de los años. Y bueno... creo hablar también en tu nombre cuando digo, desde el recuerdo emocionado que me producen estas fechas...

¡¡¡Negociación en

mi nombre,

NO!!!